A día de hoy, las relaciones de Aragón con las Comunidades Aragonesas en el exterior están desarrolladas en la Ley 5/2000, de 28 de noviembre. Esta norma define como miembros de las comunidades aragonesas en el exterior a un colectivo de personas que, por diferentes circunstancias, e independientemente de su ciudadanía actual, se considera que tienen derecho a participar en la vida cultural y social de Aragón, y establece que  las Casas y Centros de Aragón, -asociaciones, fundaciones y agrupaciones de las comunidades aragonesas, constituidas conforme a la ley-, son el cauce preferente de comunicación de las mismas con las instituciones públicas aragonesas.

Aunque el balance es enormemente positivo, transcurridos veinte años desde la entrada en vigor de la Ley 5/2000, desde la Dirección general de Desarrollo Estatutario y programas Europeos se considera fundamental reformar el régimen jurídico aplicable a dichas comunidades, con varios objetivos:

1. En primer lugar, se pretende crear un estatuto de Aragonés y Aragonesa en el Exterior, considerando como tales a aquellas personas que viven fuera de nuestra Comunidad Autónoma y que por diferentes causas (mantenimiento de vecindad aragonesa, tener reconocida la condición política de aragonés, haber nacido en Aragón pero haberse visto obligados a abandonarlo o incluso sentirse especialmente vinculadas a nuestra tierra) tienen derecho a participar en la vida cultural y social de Aragón.

Para ello:

- se crea un registro de Aragoneses y Aragonesas en el Exterior, que permita tanto tener conocimiento de las personas que viven fuera de nuestra Comunidad Autónoma pero quieren mantener el vínculo, como facilitar el mismo, permitiendo la comunicación y la cercanía.

- se recoge un acerbo de derechos y prestaciones que, como Aragoneses y Aragonesas en el Exterior, les son reconocidos por la Comunidad Autónoma, contribuyendo al reforzamiento de ese vínculo.

- de manera específica, se atiende al establecimiento de medidas para facilitar el retorno de los Aragoneses y Aragonesas en el Exterior.

2. En segundo lugar, se persigue definir  como Comunidades Aragonesas en el exterior a las Casas y Centros de Aragón, y sus agrupaciones, entidades con personalidad jurídica y sin ánimo de lucro constituidas fuera del territorio de nuestra Comunidad Autónoma para hacer efectivo el derecho de participación de los Aragoneses y Aragonesas en el exterior en la vida cultural y social de Aragón.

3. Por último, se busca reforzar el papel de estas comunidades aragonesas en el exterior, adaptándolo al nuevo paradigma social, cultural y económico aragonés, en un contexto globalizado de interdependencia y creación de redes. La transparencia, el derecho a la participación en asuntos públicos, la incorporación de nuevas tecnologías en las relaciones con la Administración y la consagración de principios de igualdad y no discriminación, deben constituirse en elementos transversales que pasen a informar la relación con dichas comunidades.